Una sombra junto al medio tanque,
sin un mango en el bolso,
con el buzo en los hombros,
bien peinado p'atrás,
estudiando el ensayo,
apurando las brasas,
codiciando callado
la pintura y el disfraz.

Relojeando a las pibas
de una noche de enero,
calibrando las copas
de los del mostrador,
el futuro murguista
garronea un cigarro
mientras tanto le aclaran:
"no salís si sos menor".

Les hablará de su infancia,
cuando llegue el momento,
sin decirlo en palabras,
sin nombrar al dolor,
faltará con su acento
en la noche estrellada,
en la cuerda de primos
con un pueblo alrededor.

De dónde vienen ?
de dónde salen ?
los herederos de
la tradición.
Escuchen otra voz,
de quién será ?
La murga vive,
nadie la enseña en ningún lugar,
los botijas se la saben
y después quieren cantar.

Iluminando el pasado,
desafiando al futuro,
denunciando el presente,
con un simple ritual,
los futuros murguistas
van a ver cada noche
a la murga ensayando
el futuro carnaval.

Hay tradiciones
que están más muertas
que un faraón
Quién baila el Pericón ?
Quién pide que le den
la comunión ?
Hay otras vivas
en las esquinas de la ciudad,
los botijas las aprenden
aunque los quieran parar.

Iluminando el pasado,
desafiando al futuro,
denunciando el presente,
con un simple ritual,
los futuros murguistas
van a ver cada noche
a la murga ensayando
el futuro carnaval.
Jaime Roos



Jaime Roos con murga Falta y Resto - Los futuros murguistas