La casa azul se volvió gris,
y no supe cuidar tus lazos de amor en el jardín.
Miro el silencio en la pared,
que hoy parece gritar que nada es para siempre.

La casa azul perdió el color,
y me cuesta entender, que si es recuerdo, ya pasó.

Soy un nudo en el vacío,
tengo el alma atada,
todo está tan frío,
todo está tan frío,
soy el dueño.

Hoy la ventana se empañó,
y nadie dibujó saetas en mi corazón.
La casa azul se volvió gris,
y no supe soltar lazos de amor en el jardín.

Soy un nudo en el vacío,
tengo el alma atada,
todo está tan frío,
todo está tan frío,
soy el dueño.
Garo Arakelián


La Trampa - La casa azul